A nivel mundial existe un debate sobre la Cogestión. La experiencia de los países europeos, no ha servido sino para que los trabajadores auto eliminen sus beneficios y conquistas. En una frase, ha servido de instrumento para que la burguesía reduzcae A nivel mundial existe un debate sobre la Cogestión. La experiencia de los países europeos, no ha servido sino para que los trabajadores auto eliminen sus beneficios y conquistas. En una frase, ha servido de instrumento para que la burguesía reduzca el valor de la fuerza de trabajo bajo el pretexto de una posible quiebra de la empresa. Ejemplo de esto ha sido la experiencia en Alemania con las empresas cogestionarias del sector automotriz, donde los trabajadores en asamblea votan a favor de reducir a casi la mitad sus beneficios inscritos en la convención colectiva. Nada más triste que esto.

La cogestión que comenzamos a aplicar en Alcasa nada tienen que ver con esto. Se trata de una verdadera emancipación de nuestra clase, basado en los principios revolucionarios de la que tanto hablaron Carlos Marx, Rosa Luxemburgo, Gramsci o Trotsky, entre otros. Se trata de crear un modelo cogestionario que tiene como objetivo cambiar el modelo de relación de producción capitalista, el cual se basa en la explotación del hombre por el hombre, por un modelo de relación social basado en los principios de la cooperación, la solidaridad, la justicia, la equidad, la corresponsabilidad y el bienestar común de los trabajadores y la población en general.

En este sentido, nuestra cogestión no busca reducir los beneficios ni conquistas de los trabajadores, sino por el contrario, está comprometida a elevar su nivel de vida. En Alcasa para dar cumplimiento a este principio acordamos dar un 15 % de aumento salarial, a pesar de que existía un instructivo de la CVG que impedía cumplir con el contrato colectivo.

Por otra parte, hemos volteado el orden jerárquico de mando al establecer la asamblea general como la máxima autoridad, seguida por las mesas de voceros y por último los gerentes, lo que invierte la estructura de mando totalmente. Y nada más revolucionario que eso.

Para darle cuerpo a esta estructura, los trabajadores han elegido sus voceros y a los supervisores y gerentes de la planta, quienes tienen carácter revocable. De esta manera, estamos creando un modelo que se fundamenta en el control obrero de la producción y de la finanzas de la empresa, ya que estamos convencidos que para lograr la liberación de nuestra clase todo el poder tiene que estar en manos de los trabajadores.

Como vemos la cogestión alcasiana no es una cogestión burguesa, es una cogestión obrera y revolucionaria que está escribiendo su propia historia.

Edgar Caldera
Director Laboral
CVG Alcasa
edgarcaldera@yahoo.es

Vea también:

* Control Obrero y Cogestión, Ricardo Galíndez

* El debate de la gestión obrera en Venezuela, Luis Primo