Por días, israelíes y palestinos han estado pegados a sus televisores viendo los eventos que se desarrollan en la Franja de Gaza. El ejército y la policía, bajo el “plan de paz” de Sharon-Bush, han estado evacuando 21 asentamientos en Gaza y 4 de los 120 asentamientos en la Ribera Occidental. 

Por semanas, los simpatizantes de los colonos (habitantes de los asentamientos) han estado usando unas cintas anaranjadas en sus brazos. En muchos lugares se podían leer consignas nacionalistas como “Un Judío no expulsa a un Judío”. Esta es una consigna que bien puede significar que “los no-judíos expulsan a los judíos” (refiriéndose supuestamente al Ejército Israelí) o que “los judíos expulsan a los no-judíos”. 

La evacuación de la Franja de Gaza empezó el pasado miércoles. Los colonos fueron desalojados del modo más gentil posible. La operación fue llamada “Una Mano a nuestros Hermanos”. Los soldados y la policía cargaron fuera del área a los colonos que se rehusaron a abandonar sus casas como si estuviesen cargando una caja de frágiles huevos. Muchos de estos derechistas tenían una Estrella de David anaranjada pegada en su pecho. Muchos de sus niños caminaban con los brazos en alto como si se tratara de pobres víctimas de los Nazis – unos simples colonizadores que le robaron las tierras a la gente de Gaza y construyeron en ellas grandes haciendas con el sudor de la mano de obra barata palestina.

Los colonos insultaron a los soldados y les arrojaron pintura, piedras y otros objetos contundentes. Pero a pesar de ello, los oficiales del ejército les hablaron como si se tratara de sus hermanos y hermanas perdidos hace tiempo. Un hombre llamado Shamir les dijo a los reporteros de una televisora que “hasta ahora creía que estos terrenos eran míos –pero ya no más.” Luego añadió llorando “¿Qué va a ser de nosotros? Nosotros teníamos unas 300 – 400 dunams (1) cada uno y ahora nos ponen en hoteles”. Más tarde ese día, el Ministro de la Vivienda, un miembro del Partido Laborista Sionista, explicó que aquellos que habían aceptado irse voluntariamente ya habían recibido nuevas villas, mientras que los otros estaban siendo ubicados en hoteles 5 estrellas hasta que el gobierno les consiguiese un nuevo hogar. Otro hombre, esta vez uno sosteniendo en sus brazos a su hija, le gritaba histéricamente a un soldado: “¡Llévense a mi hija así como hicieron los Nazis con los Judíos en Europa!”

Por 30 años,1500 familias, en total unas 8000 personas que se asentaron en Gaza luego de la ocupación israelí hace 38 años, vieron prosperar sus negocios. Recibieron gratuitamente grandes extensiones de tierra en una de las áreas más densamente pobladas del mundo. También han recibido unas villas espectaculares que les han costado prácticamente nada. Tampoco han sido removidas estas personas de Gaza sin haber convertido la evacuación en algo bueno para los negocios. Cada familia fue bien compensada, recibiendo al menos medio millón de dólares, además de recibir nuevos terrenos de cultivo en el interior. Por ejemplo, según el acuerdo, los campesinos que abandonen sus invernaderos recibirán $4.000,- por dunam (1). Los invernaderos Gush Katia cubren un área de ¡3.000 dunams (1)! Esto se da en un momento en que el número de personas viviendo bajo el umbral de pobreza en Israel ha crecido en el último año entre ¡un millón a un millón y medio!

Mientras los colonos y muchos de sus simpatizantes anaranjados se aseguraron de mostrar sus lágrimas a las cámaras de televisión, los medios burgueses no se han preocupado en preguntar qué va a suceder con los obreros palestinos que han trabajado para los colonos por 30 años, recibiendo como pago una miseria. ¿Van ellos a recibir al menos compensación en la forma de seguro de desempleo? Por supuesto que no.

Algunos de los trabajadores palestinos que se ocuparon en empacar los muebles, ropas y libros religiosos de sus amos esclavistas recibieron obsequios de 50 dólares. Algunos incluso recibieron pequeños ventiladores. Sin embargo, la mayoría de ellos recibieron nada en absoluto. Algunos palestinos lamentan haber perdidos sus puestos de trabajo, a pesar de que el pago fuese una miseria. El desempleo en la Franja de Gaza asciende al 80%. Sin embargo, ninguno lamenta ver irse a los colonos mismos.

Algunos niños palestinos están contentos por primera vez en sus vidas. Creen que por fin podrán volar una cometa sin el temor de que les disparen. Esto, sin embargo, no es sino una triste ilusión.

El jueves, como se esperaba, el Secretario General de la ONU Kofi Annan, quien por años ha sido el fiel servidor del imperialismo norteamericano, alabó a Sharon por su coraje y liderazgo al actuar sobre su plan de retirarse de Gaza. “Esto llevará a la paz en el Medio Oriente”, prometió Annan. Qué otra cosa se podría esperar de un hombre que apoya la ocupación de Irak y alabó las fraudulentas elecciones que se llevaron a cabo bajo las bayonetas del imperialismo. Su trabajo muy bien remunerado es más bien simple, cuando todo lo que debe hacer es repetir las palabras de su maestro, George W. Bush.

Annan también repitió las palabras de condena de Sharon por la masacre del miércoles pasado cuando un colono judío en la Ribera Occidental tomó el arma de un guardia de seguridad y asesinó a cuatro trabajadores palestinos. Nadie se ha ocupado en preguntar como un colono desarmado pudo agarrar un arma sin encontrar resistencia.

Por supuesto que Annan parece no conocer que los colonos están llevando adelante más actos terroristas contra los palestinos –un golem (2) creado por el Estado israelí para aterrorizar a los palestinos y tomar más tierra y que ahora está fuera de control y ha adquirido mente propia. Tampoco mencionó Annan el hecho que dos días después de la masacre el ejército israelí se movilizó para tomar 1.200 dunams (1) de tierras palestinas de la población de Gabel El Hamara cerca de Ali y Shila –el mismo asentamiento donde fueron asesinados los cuatro trabajadores. ¿Será tal vez que Annan crea que estos también son otros pasos en la dirección de la paz?

El gobierno israelí no va a detener el movimiento derechista y mesiánico que él mismo creó pues este movimiento le es de gran utilidad a la clase dominante. No sólo les sirve para aterrorizar a los palestinos, sino que en el futuro también puede ser usado contra los trabajadores en pie de lucha por sus derechos.

Mientras que Sharon presenta las instrucciones que recibió de Bush como un importante paso estratégico y promete que ahora habrá dinero para educación y salud, esto nunca sucederá. Al mismo tiempo, la retirada israelí de Gaza fue presentada por la Autoridad Palestina como un gran logro de la política de apoyo a la Pax Americana.

El papel actual de la Autoridad Palestina fue descrito por Amira Has, un valiente reportero de Haaretz, quien escribió el pasado 16 de Agosto que la policía palestina se vio lista para ayudar en el desalojo israelí. Sin embargo, esta misma policía no estaba por ningún lado cuando los escuadrones de la muerte de Dahalan, vestidos de negro y armados con Kalashnikovs, estaban aterrorizando a la gente de Gaza.

El problema no se haya aislado solamente a Gaza. El jueves pasado se perpetró un atentado contra la vida de Hassan Youssef, un líder importante de Hamas en la Ribera Occidental. Éste describió el atentado en su contra como un intento de intimidas al grupo islámico por su negativa a detener su lucha contra Israel.

Las masas palestinas están conscientes del papel de este gobierno títere. El 17 de agosto, Naser el Kadwa, el Ministro de Relaciones Exteriores palestino debía dar un alegre discurso sobre la retirada. Sin embargo, no pudo hacerlo debido a la manifestación de las madres de los prisioneros, quienes lo culpaban de ignorar a sus hijos detenidos en cárceles israelíes por luchar contra la ocupación. Una de las madres declaró que estaba muy arrepentida de haber votado por Mahmoud Abbas, quien había hecho absolutamente nada por cumplir con sus promesas electorales. También dijo que lo único que le importaba al Primer Ministro Ahmed Karia era venderles cemento a los israelíes para que pudieses continuar construyendo su muro del Apartheid.

Las tensiones están creciendo tanto a lo interno del Fatah como entre Fatah y Hamas. La semana pasada, Faruk el Kadumi, presidente del Comité Central de Fatah y Jefe del Departamento de Política, emitió una orden desde Túnez para destituir a todos los comandantes y empleados de las fuerzas de seguridad palestina que estuviesen bajo el control de Dahalan, un hombre que fue especialmente preparado por el imperialismo norteamericano y británico. También ordenó que aquellos que fuesen destituidos debían ser reemplazados por una nuevamilicia totalmente subordinada a la lucha revolucionaria palestina. Esto es un claro desafío a la Autoridad Palestina y a Abu Mazen (Abbas), quien es visto por un creciente número de palestinos como un colaborador de Sharon. Esta orden fue emitida en apoyo a las fuerzas de la oposición armada en Gaza. Hace dos semanas, el mismo Faruk el Kadumi hizo un llamado por la organización de una milicia popular de todas las fuerzas opuestas a Abu Mazen. Esto incluye a miembros de Fatah, Tanzim, y gente como Musa Arafat, quien tiene algo de control sobre la inteligencia militar. Durante las últimas semanas ha habido incidentes en los que fuerzas leales a Dalahan y aquellas que se le oponen han intercambiado disparos.

En la víspera de la retirada israelí de Gaza, el líder de Hamas en la Franja de Gaza, Muhammed Azhar, dijo en un discurso que el programa de Abu Mazen era por “una autoridad, una ley, un arma”. Azhar preguntó que de cuál autoridad, ley y arma está hablando Abbas. ¿Las armas de aquellos que luchan contra la ocupación o las armas de la policía?

Otro líder de Hamas, Ahmad Andur, explicó que Hamas no iba a rendir sus armas y no se iba a volver parte del aparato de la Autoridad Palestina. También indicó que Hamas no iba a iniciar un ataque contra Israel, pero que iba a usar sus armas para defenderse.

Nuestra posición en contra de los actos terroristas de Hamas contra israelíes inocentes es bien conocida. No se debe simplemente a razones humanitarias, sino debido a que estas acciones empujan a los israelíes a las manos de Sharon. Nosotros queremos un Estado obrero palestino/israelí, no un Estado religioso. Nuestros enemigos son los grandes bancos y los explotadores, no el pueblo israelí. Sin embargo, también debemos defender incondicionalmente al pueblo palestino de los horrores del terrorismo de Estado de Israel.En el caso que Sharon atacara Gaza en apoyo a Dahlahan y Abu Mazen, cualquier persona honesta en Gaza seguramente demandaría la formación de un frente anti-imperislista para combatir a los ocupantes.

Seamos claros. La evacuación de Gaza no es más que un huesito que el imperialismo norteamericano le ha lanzado a las masas en un intento desesperado por ganar una paz industrial mientras continúa su ocupación de Irak y mientras Israel continúa construyendo asentamientos en la Ribera Occidental. La Hoja de Ruta para la Paz en el Medio Oriente está en ruinas, y con la inestabilidad que se disemina desde Irak a toda la región como una plaga, los EEUU están desesperados por aparecer como que están haciendo algo, aparecer como si estuvieran apagando fuegos.

La retirada de Gaza sólo va a servir para causar mayores divisiones entre israelíes y palestinos. Igualmente va a incrementar las tensiones entre los mismos palestinos. La gente va a darse cuenta que a medida que Israel se retira de Gaza se construyen más y más asentamientos en la Ribera Occidental. Esto va a alimentar el deseo entre los palestinos por que les devuelvan tanto la Ribera Occidental como el este de Jerusalén. Esto va a conducir a muchos hacia los brazos abiertos de los militantes, los cuales ahora mismo ya están dando muestras de fortaleza. El brazo fuerte del Estado israelí en Gaza va a ser reemplazado por la colaboracionista Autoridad Palestina de Abbas, quien se verá forzado a hacer entrar en cintura a los militantes para mantener feliz a Israel.

La retirada también propiciará divisiones dentro de los propios israelíes. El retiro ha didivido a Israel como nunca antes había sido dividido. Bush y Sharon, y sus voceros en los medios burgueses, están tratando de presentar la desocupación de Gaza como un paso concreto hacia la paz. Algunos incluso llegan a decir en susurros que es un paso hacia la creación de un Estado palestino. El plan de pacificación no va a conseguir ninguno de estos objetivos. La Autoridad Palestina, al convertirse en una extensión del brazo fuerte del Estado israelí, no va a tener el apoyo para ejercer su control. La retirada de Gaza sólo servirá para echarle leña al fuego de los conflictos.

No hay forma ni manera en que los israelíes y palestinos puedan vivir en paz mientras siga existiendo el capitalismo. El Estado de Israel, apoyado por los EEUU, nunca va a ceder el este de Jerusalén, nunca va a ceder en los grandes bloques de asentamientos, nunca va a resolver la cuestión de los refugiados y nunca va a liberar a todos los prisioneros palestinos. La única vía para terminar este círculo vicioso de sangre es el camino del Bolchevismo, el camino de Lenin y Trotsky – el camino de la revolución socialista y el establecimiento de una Federación Socialista del Medio Oriente, donde todas las nacionalidades, desde los kurdos hasta los israelíes hasta los palestinos, puedan tener autonomía territorial dentro de esta federación. Ése es el único verdadero camino hacia la paz.

Jerusalén, 21 de Agosto de 2005

NOTAS:

(1) Dunam: Medida de área de tierra usada especialmente en el Medio Oriente que, en Israel, equivale a 1.000 metros cuadrados y se le conoce también por ello como dönüm métrico.

(2) Golem: En el folklore hebreo, un humano artificial dotado de vida. Sin. Autómata.

Traducción de Israel: The withdrawal from Gaza … a step towards peace?