Nos preparamos para un nuevo primero de mayo en medio de un presente mundial cada vez más convulso. La clase obrera internacional es testigo del genocidio contra el pueblo palestino, la escalada de tensiones y amenazas de guerra en Medio Oriente, la brutal masacre en la República Democrática del Congo, el choque interimperialista en Ucrania, entre otros eventos. Hace más de un siglo, Lenin dijo que el capitalismo es horror sin fin. Dichas palabras son hoy tan vigentes como incuestionables.